DISPOSITIVO DE MEDICIÓN DE LA CALIDAD DEL AIRE "SAFE".
AIRE SANO, VIDA SANA: LA CALIDAD DEL AIRE SIEMPRE A LA VISTA
Llevamos una dieta sana y equilibrada, nos abstenemos del azúcar y el alcohol, hacemos ayuno intermitente y hacemos ejercicio regularmente. Lo que a menudo olvidamos es que pasamos la mayor parte del tiempo en interiores. El clima interior desempeña un papel considerable en nuestra salud y bienestar. El equilibrio entre las concentraciones de oxígeno y CO2, así como la temperatura y la humedad son tan importantes en la oficina como en nuestros espacios vitales. Pero, ¿Cómo sabemos si la calidad del aire interior es buena o mala? Cada persona siente las cosas de forma diferente, por lo que una habitación que le parece sofocante a una persona puede parecerle agradablemente cálida a otra. No confíe en las sensaciones personales cuando se trata de un aire interior saludable; déjese guiar por datos y hechos fiables, como los que proporciona nuestro dispositivo de medición de la calidad del aire "Safe".
MEDICIÓN DE CO2
MENOS CO2, MENOS TENSIÓN
¿Qué es una buena calidad del aire? Un exceso de CO2 en el aire interior puede provocar dolores de cabeza, dificultades de concentración, mareos y desgana; un nivel de CO2 de 200.000 ppm o más puede incluso provocar la muerte. Porque demasiado CO2 significa poco oxígeno, y también indica la presencia de muchos aerosoles, que pueden ser portadores de virus. El medidor de la calidad del aire es meticulosamente preciso, de modo que no se pasa por alto ni una sola molécula de CO2. Esto es posible gracias al sensor NDIR (infrarrojo no dispersivo), especialmente adecuado para la medición de gases. Los valores medidos se especifican en ppm exactas y son fáciles de leer. Por supuesto, no todo el mundo puede analizar estos valores. Por ello, hay un indicador de señalización claro y fácil de interpretar. Si está en verde, todo va bien: la calidad del aire es buena; si está en rojo, hay que reaccionar de inmediato. Además, suena un tono de alarma en el nivel de advertencia rojo intenso de 1001 a 2000 ppm, que se hace más intenso a medida que aumenta el deterioro. De este modo, el dispositivo de medición de la calidad del aire le permite saber, a tiempo, cuándo es necesario ventilar a fondo para establecer el equilibrio correcto de oxígeno y CO2 y desterrar los aerosoles cargados de virus.
